Mary Kingsley nació en 1862 en Londres y murió joven en 1900 pero especialmente los últimos años de su vida fueron intensos se convirtió en una entusiasta exploradora, viajera y aventurera recorriendo África para dejarse enamorar por este preciosa tierra.
La buena noticia es que la fortuna nos sonríe y quiso que el destino convirtiera a esta singular mujer en escritora para que la humanidad pueda leer sus idas y venidas, o sus pasiones que quedaran recogidas en algunas de sus novelas publicadas.
Índice Contenido
Científica y escritora
Numerosos estudios etnológicos y otros científicos la confrontaron a menudo con la sociedad, sus viajes al continente africano en una época donde era embarcarse en una gran andanza le dieron suficientes argumentos para sus reflexiones científicas y sus libros.
Libros de Mary Kingsley
Su primer libro se publica en 1897 después de volver de unos de sus viajes a África, acumula sus primeras experiencias africanas y lo titula “Travels in West África”, defendiendo al africano de las voces
racistas del viejo continente, para Kingsley son personas y no salvajes como muchos europeos los consideran en este.
Sus pensamientos progresistas y sus ideas viniendo de una mujer la convierten a menudo en personaje de controversia y pronto en alguien muy popular en la sociedad inglesa.
Otros libros publicados por esta mujer son: West African Studies (MacMillan, 1899) y The story of West Africa (Horace Marshall, 1900).
Viajera y Solidaria
No solo viajó o trabajo en proyectos científicos sino que la guerra entre ingleses y bóers la llevó a convertirse en una solidaria enfermera y su exposición a la pobreza, dureza y la enfermedad del tifus acabó con su vida a la pronta edad de 37 años, en su tercera vez que pisaba el continente. Tal y como ella deseó, sus restos fueron lanzados al fondo del mar en Sudáfrica.
Sátira e Ironía
Utilizó las palabras para expresar sus gestos, algunas de sus frases fueron mordaces y agudas como así lo demuestra:
«Me comporto de forma exquisita, casi como una santa, y me maravilla mi actitud….»
«…aquella buena gente hacía en sus crónicas no era describir el país en el que residían, sino explicar cómo avanzaba hacia lo que debía ser …»
«… Si hay un paraíso, el mío es ése; es más, creo firmemente que si me dejaran el tiempo suficiente ante una escena como esa, o sobre la cubierta de un navío en una ensenada africana, ….»
«Un negro no es un blanco subdesarrollado de la misma manera que un conejo no es una liebre sin desarrollar«.
Grandes dificultades para grandes alegrías
El continente africano y sus viajes a el le aportaron parte de sentido a su vida aunque las dificultades, peligros y contradicciones estuvieran presentes, la muerte de sus padre en un periodo de semanas la abocaron a lo que daría rumbo a su existencia. Ser mujer viajera, exploradora e independiente en esa época ya fue una osada odisea, ser blanca en un continente negro fue difícil, demostrar la igualdad de las razas al mundo occidental fue un atrevimiento, sin duda esta mujer pionera, inteligente e inquieta merece al menos un pequeño reconocimiento.
Podría hablar de ella un rato largo pero ahora es cosa tuya si quieres investigar y descubrir más…