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Islandia un país de agua, hielo y fuego
Si vas a Islandia no dejes de visitar su naturaleza tan diferente, tan rica, tan espectacular, me parece que aquí coge otra dimensión. Pero no solo te asomes a visitar un lugar fantástico sino que incluye un trekking para verlo eso te dará una dimensión diferente de esa belleza natural.
Una de las cosas que más me gustó de Islandia es sus contrastes, entre ellos los que produce las aguas geotermales. Esta isla volcánica y activa tiene numerosos puntos dónde conviven los glaciares, neveros o lagos helados con el agua caliente que resurge del interior de la tierra como de una novela de Julio Verne.
Un baño increíble de agua caliente en tierras frías
Muy cerca de Reikiavik existe un lugar dónde tras caminar poco más de 1 hora irás a parar a un río con sus afluentes de agua caliente surgida de la tierra ardiente que te dan diferentes temperaturas para encontrar la que más te agrade. Es normal, que camines con frío pero que al llegar aquí puedas disfrutar de esa agua caliente que te recupere. Esto no tiene precio. Es algo único, es algo que si tienes la oportunidad debes probar.
Un consejo, no dejes de no hacerlo porque pienses que vas a pasar frío al salir, la verdad es que tienes unos minutos dónde tu cuerpo almacena el calor corporal suficiente para aguantar hasta vestirte.
Una excursión algo diferente
Para ir a Hverageroi puedes ir en coche o en autobús de línea. Pero para ir hasta el punto de inicio, debes pasar este pueblo hasta un gran aparcamiento, aquí ya existen paneles informativos de la ruta de montaña y de los fenómenos geotermales de la zona. Lugar de contrastes con mucha magia. Capaz de estar soportando un frío horrible para darse un chapuzón en las aguas calientes y agradables de este sitio.
El trekking no tiene ninguna dificultad, pista la primera parte dónde no tiene pérdida. Se intuye claramente por dónde ir al Valle de Reykjadalur, además siempre hay gente que asciende en esa dirección. Cuando vayas caminado tendrás la opción de acercarte a las fumarolas del camino y a las pozas de agua hirviendo que tanto impresionan.
La segunda parte, ya metidos en el valle se convierte la pista en sendero marcado para acabar en las pozas de agua caliente.
Estas pozas, en el propio río, son mezcla de agua fría que proviene del río con las aguas calientes filtradas del subsuelo. Depende en que pozas te encuentres la mezcla de agua caliente y fría será una u otra dando diferentes temperaturas para diferentes gustos.
Se ha vuelto tan popular el lugar entre montañeros que se han puestos diferentes pasarelas y puentes de madera para atravesar el río y sus pozas.
Hot springs del valle de Reykjadalur
Los hot springs son estas pozas de agua caliente que se forman en el propio río dónde los montañeros o turistas hacen un alto en el camino para darse un bañito de agua caliente.
Hverageroi es el pueblo más cercano a este paraje natural hacia dónde tenemos que ir para llegar aquí, tan solo se encuentra a 45 kilómetros de Reikiavik. El problema del transporte público, si no ha cambiado, es que te deja a 3 kilómetros del punto de inicio. Pero tampoco es una opción descabellada, no hay excesivo desnivel y no te va a suponer muchísimo tiempo, y más si eres un montañero.
Sea como fuere, si tienes medio día o medía tarde cerca de Reikiavik te aconsejo que te acerques a este paraje de aguas geotermales, fumarolas y montañas encantadoras.
El premio después de 1 h 30 minutos de andar, un cardera de agua caliente pero cristalina en medio del mejor escenario posible. Relajación, felicidad, recuperación o vivir una experiencia única que solo aquí podrás tener, muy cerca del Monte Hengill y los hot springs.
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